Llegamos a los últimos coletazos del verano y comienza la nueva temporada. Iniciamos nuestra serie de artículo de psicología deportiva tras un pequeño parón estival, y comenzamos con un tema muy interesante: "El Sexo".
¿Podemos usar sus beneficios en la práctica deportiva?, ¿Sexo antes o después de la competición?, estas son algunas de las preguntas que nos plantea Marisa y que pone un foco de luz para poder tener criterios a la hora de enfocar nuestras relaciones íntimas.
Llega la hora de volver a los entrenamientos y competiciones y tanto Marisa como yo nos hemos propuesto compartir artículos con temas interesante para mejorar tanto en los aspectos psicológicos como físicos y nutricionales. Así que no dejéis de leer nuestras propuestas, suscribiros al canal y si hay algún tema que creéis interesante para escribir dejarnos un comentario.
Sin más os dejo con este interesante artículo, espero que utilicéis el sexo como el complemento ideal para la competición y los entrenamientos, pero sobre todo que lo disfrutéis al máximo.
Sexo y Deporte
El sexo y el deporte hacen una pareja idónea: ambos se pueden
ayudar para conseguir ese estado de bienestar físico y mental ideal.
Mediante la práctica del deporte se estimulan muchas áreas de
nuestro organismo las cuales mejoran el estado de ánimo y nuestra sexualidad. Cuatro sustancias intervienen en
el deporte: las endorfinas, la serotonina, la dopamina y la noradrenalina. Estos neurotransmisores son los que nos hacen
sentir relajados, contentos, y aumentan nuestra capacidad de sentir,
promoviendo el deseo para sentir placer...Y como pez que se muerde la cola,
daremos comienzo a un círculo virtuoso: una buena salud sexual nos permitirá mantener un estado de ánimo más
positivo
Las complicaciones surgen cuando dejamos que nuestra mente
interfiera en el desempeño de ambas experiencias.
La mente, por medio de la experiencia, ha aprendido a ser muy
exigente y crítica. El ego, a través del lenguaje, dirige nuestros pensamientos,
nuestra autoestima y nuestro valor como
personas. En el deporte nos susurra cosas como: “No puedo hacerlo, es demasiado
difícil, nunca conseguiré mis objetivos…”. En la cama dice cosas como: “Uno
rápido, habrá que cumplir, si no se pondrá de morros”, “Si no le doy placer no
me querrá”, “No puedo, no puedo, por más que lo intente, no me relajo…”, “No me
siento lo suficiente atractiva para él”.
“El cuerpo escucha lo que la mente dice”
Si tu diálogo interior dice
“no puedo”, tendrás razón: no podrás. En ambos casos.
Para poder disfrutar del deporte (y del sexo) hay que estar
en lo que se está haciendo. Disfrutar del momento, de las sensaciones y de la
información que te transmiten tus sentidos. Usa los cinco para captar la
esencia del instante y dejar que la mente se concentre en el aquí y ahora.
El Mindfulness es una práctica muy importante en el deporte
ya que te hace disfrutar y fluir en tu actividad. No es fácil, requiere de
práctica para saber reconocer lo que tu mente te está diciendo o para acallarla
cuando te distrae. Pero, si llegas a sentir ese "flow" en el deporte, realmente
es como un orgasmo de placer, nada importa sino ese instante de felicidad y
rendimiento a tope.
El Mindfulness en el sexo, o lo que es lo mismo, el sexo
tántrico, es dejarse llevar por todas las sensaciones del momento (tanto en
pareja como solo). Apartar el estrés, los problemas del día a día y encontrar
ese equilibrio para conectar con los placeres de la vida.
En ambos casos, los neurotransmisores harán su papel y
beneficiaran tu estado anímico.
Ya lo dice el dicho: ¡Haz el amor y no la guerra!
La pregunta del millón, ahora que sabemos los beneficios del
sexo en el deporte y viceversa.
¿Afecta el sexo antes de competir al rendimiento deportivo?
Muchos estudios se han realizado acerca de esta pregunta.
Utilicemos la lógica y conozcamos nuestros cuerpos, ya que
cada uno tiene sus propias necesidades y rituales.
Está claro que si te pasas toda la noche anterior a la
competición enfrascado en un frenético desenfreno amoroso, vas a levantarte
cansando.
Aquí la palabra clave es autoconocimiento. No hay respuesta
válida para todas las circunstancias, a veces el sexo servirá para relajarte
antes de competir y otras te cansará y te creará aún más ansiedad. Escucha tu
cuerpo, ¿Qué te pide?
¿Soledad, tranquilidad y concentración antes de la
competición?
¿O compañía amorosa para relajarte?
Todo está bien mientras se haga desde el respeto a uno mismo…
Todo está bien mientras se haga desde el respeto a uno mismo…No dudéis en contactar con esta gran profesional y por supuesto estaremos muy atentos esperando las siguientes propuestas de Marisa. Aquí os dejo sus datos de contacto para todos los que queráis poneros en contacto con ella. Un saludo.
Consulta Presencial y Online. Teléfono: 626461756; email:hola@marisarichelle.com /marisa.richelle.psicologa@gmail.com; www.marisarichelle.com
El sexo y el deporte hacen una pareja idónea: ambos se pueden
ayudar para conseguir ese estado de bienestar físico y mental ideal.
Mediante la práctica del deporte se estimulan muchas áreas de nuestro organismo las cuales mejoran el estado de ánimo y nuestra sexualidad. Cuatro sustancias intervienen en el deporte: las endorfinas, la serotonina, la dopamina y la noradrenalina. Estos neurotransmisores son los que nos hacen sentir relajados, contentos, y aumentan nuestra capacidad de sentir, promoviendo el deseo para sentir placer...Y como pez que se muerde la cola, daremos comienzo a un círculo virtuoso: una buena salud sexual nos permitirá mantener un estado de ánimo más positivo
Las complicaciones surgen cuando dejamos que nuestra mente
interfiera en el desempeño de ambas experiencias.
La mente, por medio de la experiencia, ha aprendido a ser muy
exigente y crítica. El ego, a través del lenguaje, dirige nuestros pensamientos,
nuestra autoestima y nuestro valor como
personas. En el deporte nos susurra cosas como: “No puedo hacerlo, es demasiado
difícil, nunca conseguiré mis objetivos…”. En la cama dice cosas como: “Uno
rápido, habrá que cumplir, si no se pondrá de morros”, “Si no le doy placer no
me querrá”, “No puedo, no puedo, por más que lo intente, no me relajo…”, “No me
siento lo suficiente atractiva para él”.
“El cuerpo escucha lo que la mente dice”
Si tu diálogo interior dice
“no puedo”, tendrás razón: no podrás. En ambos casos.
Para poder disfrutar del deporte (y del sexo) hay que estar
en lo que se está haciendo. Disfrutar del momento, de las sensaciones y de la
información que te transmiten tus sentidos. Usa los cinco para captar la
esencia del instante y dejar que la mente se concentre en el aquí y ahora.
El Mindfulness es una práctica muy importante en el deporte
ya que te hace disfrutar y fluir en tu actividad. No es fácil, requiere de
práctica para saber reconocer lo que tu mente te está diciendo o para acallarla
cuando te distrae. Pero, si llegas a sentir ese "flow" en el deporte, realmente
es como un orgasmo de placer, nada importa sino ese instante de felicidad y
rendimiento a tope.
El Mindfulness en el sexo, o lo que es lo mismo, el sexo
tántrico, es dejarse llevar por todas las sensaciones del momento (tanto en
pareja como solo). Apartar el estrés, los problemas del día a día y encontrar
ese equilibrio para conectar con los placeres de la vida.
En ambos casos, los neurotransmisores harán su papel y
beneficiaran tu estado anímico.
Ya lo dice el dicho: ¡Haz el amor y no la guerra!
La pregunta del millón, ahora que sabemos los beneficios del
sexo en el deporte y viceversa.
¿Afecta el sexo antes de competir al rendimiento deportivo?
Muchos estudios se han realizado acerca de esta pregunta.
Utilicemos la lógica y conozcamos nuestros cuerpos, ya que
cada uno tiene sus propias necesidades y rituales.
Está claro que si te pasas toda la noche anterior a la
competición enfrascado en un frenético desenfreno amoroso, vas a levantarte
cansando.
Aquí la palabra clave es autoconocimiento. No hay respuesta
válida para todas las circunstancias, a veces el sexo servirá para relajarte
antes de competir y otras te cansará y te creará aún más ansiedad. Escucha tu
cuerpo, ¿Qué te pide?
¿Soledad, tranquilidad y concentración antes de la
competición?
¿O compañía amorosa para relajarte?
Todo está bien mientras se haga desde el respeto a uno mismo…
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