martes, octubre 20

HERRAMIENTAS PARA ANTICIPARTE A LAS LESIONES




¿Quién no se ha lesionado alguna vez?, ¿Has pensado alguna vez que muchas de esas lesiones las podemos evitar?. Vivimos en una sociedad donde el estrés y las prisas marcan el compás del día a día. Cientos de obligaciones familiares, laborales, sociales, nos abruman en lo que parece un día con menos horas. No llegamos al final del día y ya tenemos que estar pensando en el siguiente. Pues bien, a ello le sumamos, entrenamientos, objetivos y retos cada vez más ambiciosos y una personalidad exigente que nos lleva a tratar de cumplirlos. Con este escenario: ¿Te extrañas que nos podamos lesionar?. Tano sí estas en esta situación, como para evitar caer en ella, Marisa nos "ilumina" con alguna de esas situaciones tan exigentes y como quitarnos esa carga. Un gran artículo, como siempre, que no debéis dejar de aprovechar.







¨Lesionado, otra vez, menuda dksjfhcnivnslasñlfjrñjlslkfjlsfj¨ 


Esta es la peor pesadilla para un deportista. 

Cuando estamos lesionados, nuestros pensamientos tienden al catastrofismo, al victimismo y a la desesperación. Tendemos a la negación, nos es difícil creer que esto nos esté pasando de nuevo, y pronto pasamos a la autocompasión. 

Y todo eso sin mencionar el dolor físico que experimentamos. 

¿Y sí te digo que la mayor parte de las lesiones las podemos prevenir? Está claro que los factores físicos son las primeras causas de lesiones deportivas: el exceso de entrenamiento, desequilibrios musculares, caídas, fatiga física, etcétera... 

Sin embargo, hay factores psicológicos que pueden contribuir a esa lesión: muchos estudios ya han revelado que los factores psíquicos desempeñan un papel importante no sólo en la prevención, sino que además pueden ayudar en la rehabilitación de lesiones. 





Vamos por pasos. 




Marisa, dices que las lesiones las podemos prevenir ¿Cómo? 


Uno de los FACTORES IMPORTANTES a los que nos enfrentamos a diario y del que NO somos CONSCIENTES de su impacto es el ESTRÉS acumulado. Tan sencillo como eso ¿Qué pasa cuando sufrimos estrés? Nuestra atención y concentración disminuye. No es algo que podamos tomar a la ligera, pues la atención periférica te permite observar en conjunto el terreno que pisas y te permitiría reaccionar a los diversos desniveles de la montaña. Cuando estamos estresados experimentamos una tensión muscular que interfiere en nuestra coordinación normal y aumenta la probabilidad de sufrir una lesión. 

Pero Marisa, si yo no estoy estresado ¡Estoy más fresco que una lechuga! 

Enhorabuena si es así, pero… ¿Estamos seguros de eso? En la sociedad actual nos hemos acostumbrado a convivir con cierto nivel de estrés sin percibirlo ¿Cómo saberlo con seguridad? Mira a tu alrededor, observa cómo está tu vida, tu trabajo... ¿Has sufrido algún cambio drástico hace poco? ¿Alguien en tu familia está enfermo? ¿Tienes problemas de pareja, con los niños, con el jefe? Quizás hayas tenido una discusión con una amiga o estés atravesando una crisis existencial. 

Y ahora mira en tu interior. ¿Has experimentado problemas para dormir? ¿Estás comiendo mucho o por el contrario, se te ha cerrado el estómago? Pregúntate si estás bebiendo más de lo normal. ¿Es posible que hayas cogido nuevos hábitos no muy saludables? ¿Crees que estás irritable, quejica, malhumorado? ¿Te sientes falto de energía o con mucha ansiedad? 

Atento a las señales. 

Todos experimentamos cambios o momentos incómodos en nuestro día a día que en un principio pasan desapercibidos, pero a la larga pesan en nuestra forma de ser, pensar y actuar. Utilizamos el deporte como estrategia de evasión y es cierto que ayuda muchísimo, pero a la vez hay que estar atento a las señales de alarma. 




El estrés no es sólo el único factor de lesiones. Uno importante sí, pero cabría sumar como otra importante causa de las lesiones la personalidad de cada uno. Ya se describió en el artículo titulado “¿Qué tipo de corredor eres?” Los corredores perfeccionistas y los incansables son los más susceptibles a las lesiones. Los perfeccionistas tienden a empujarse hacia límites muy estresantes, con un pensamiento autocrítico, obligándose a rendir siempre al máximo.
Los incansables no saben decir que no a sus múltiples actividades, olvidándose de la fatiga acumulada hasta que ya es demasiado tarde. Estos corredores deben estar alerta sobre la información que les trasmite su cuerpo en los entrenamientos y en sus actividades cotidianas. Es recomendable empezar a distinguir entre el malestar normal que acompaña la sobrecarga y el aumento de volumen del entrenamiento del dolor que acompaña las lesiones. 

De igual forma, los corredores temerosos deben estar alerta de sus pensamientos y de su diálogo interior, ya que la falta de confianza y el ser demasiado cautelosos puede causarles un tropiezo tonto y lesionarse. 


Otras de las causas de las lesiones es lo que la sociedad y la educación nos han inculcado desde pequeños. Consignas del tipo: ¨No hay triunfo sin dolor¨ y ¨esfuérzate hasta el agotamiento¨. Esa creencia de que hay que entrenarse a través del dolor y de que ¨más siempre es mejor¨ , es un pensamiento que sigo escuchando hoy en día entre mis compañeros o incluso a nivel personal: parece que si no se aprieta al máximo uno no vale lo suficiente. Se nos tacha de perezosos o de desapasionados. 

No me interpretéis mal aquí. Hay que esforzarse, sí, salir de la zona de confort física para mejorar, pero siempre con la dirección de un entrenador experimentado que te guíe y te empuje, pero que también te diga cuando hay que parar y descansar (parte muy importante del entrenamiento). Concluyendo éste punto, es muy importante escuchar lo que te dices cuando entrenas. Esas creencias siguen arraigadas en nuestro ser y en momentos puntuales resurgen automáticamente, pero se consciente y vigila tus sensaciones corporales. 

Imaginémonos que por XYZ, nos lesionamos. Al fin al cabo hay que ser realistas y cuando practicamos deporte de forma continua, a alto nivel, esa posibilidad siempre está. 

Por mucho que podamos manejar el exterior y el interior, a veces, nos lesionamos sin más, es parte del juego. 

Lesionados, el factor psicológico es muy importante de manejar para una correcta recuperación. 

Las respuestas emocionales cuando nos lesionamos varían entre cada uno: negación, enfado, desesperación, depresión, aislamiento, sentimientos de culpabilidad, sentirse vacíos, sensación de shock, pérdida de identidad personal, ansiedad, falta de confianza, tristeza o frustración. 

Como veis, las lesiones son muy complejas. El deporte para mucho de vosotros es parte de vuestra identidad, es un estilo de vida y si de repente tenéis que parar, no os gustará. Ahora bien, mi consejo principal y más importante para poder empezar una buena recuperación es que aceptes la situación. Sí, tienes derecho a enfadarte, a frustrarte y a llorar de impotencia, pero no te quedes estancado en ese estado. 

Desahógate y concéntrate en tu próximo objetivo: ¡Recuperación! Enfócate en lo que sí puedes hacer mientras estás lesionado, guíate por profesionales y actívate, un día detrás de otro. 



Para cualquier pregunta, no dudéis en contactar conmigo.

¡Disfruta de tu deporte!

Gracias- Marisa Richelle-




No dudéis en contactar con esta gran profesional y por supuesto estaremos muy atentos  esperando las siguientes propuestas de Marisa. Aquí os dejo sus datos de contacto para todos los que queráis poneros en contacto con ella. Un saludo. 

Consulta Presencial y Online. Teléfono: 626461756; email:hola@marisarichelle.com/marisa.richelle.psicologa@gmail.com; www.marisarichelle.com


4 comentarios:

" Listerine" dijo...

Gracias de nuevo por estas aportaciones.Una pausa para reflexionar, que olvidamos hacer de vez en cuando.Gracias

Moskys dijo...

Gracias por tu aportación, la verdad que muchas veces llevamos un ritmo tan acelerado que no nos permite pensar lo que estamos haciendo. Ciertamente, buscamos no pensar en lo importante. Fundamental parar y reflexionar sobre nuestra situación....

Carletto dijo...

Muy buen artículo. Podríais publicar uno tratando el tema de como afrontar dejar de hacer el deporte que siempre has practicado o el deporte simplemente, debido a una lesión crónica o al no superar dicha lesión. Muchas gracias. Un saludo.

Moskys dijo...

Gracias Carletto por tu propuesta, es un tema muy interesante y seguro que pronto trataremos el tema. Un saludo y gracias por seguir el blog y los artículos.