La Marina Alta es la comarca costera situada más al norte de la provincia de Alicante. Tiene una orografía bastante compleja, ya que la surcan numerosas montañas, valles y una costa muy accidentada muestra de ello son numerosos acantilados, calas y cabos que se encuentran en estas tierras.
La Lloma Llarga supone por un lado supone una linea divisoria entre la parte costera y la del interior y por el otro un magnífico balcón para disfrutar de unas vistas impresionante de toda la orografía de la Marina Alta.
Una ruta sencilla que nos permite conocer un poquito más esta parte de la comarca. Tan solo debemos prestar atención en la bajada de la Lloma hacia una pista asfaltada que no hay senda y requiere un tanto de pericia en estos terrenos. Por lo demás una ruta muy fácil.
FICHA TÉCNICA:
FECHA: 13-12-2014
DISTANCIA: 12 km
DURACIÓN: 4:26 horas Ritmo tranquilo, parando 15 minutos para comer algo. Y nos hemos entretenido en algún tramo.
MODALIDAD: Senderismo.
TIPO DE RECORRIDO: Semi-Circular.
DIFICULTAD FÍSICA: Baja. Es una ruta corta y sin mucho desnivel. Ideal para todos los públicos.
DIFICULTAD TÉCNICA: Baja. En el 95 % la ruta es muy sencilla y apta para todos los públicos, tan solo la bajada a la carretera que nosotros la hemos hecho fuera pista y era algo incómoda.
ORIENTACIÓN: No presenta dificultad, muy evidente la cima hacia donde nos dirigimos. Si es cierto que podemos encontrar varios caminos y pistas.
TIPO DE VÍA: Pista ancha, senda bien pisada y un tramo de fuera pista.
ÉPOCA APROPIADA: Todo el año.
EQUIPO NECESARIO: Material de senderismo: zapatillas de senderismo, ropa transpirable, forro polar. Gorra y gafas de sol. Bastones de caminante también son recomendables. Agua. Algo de comida para reponer las fuerzas. Recomendable llevar frontal o linterna. Ampliar la información visitando este post.
LA RUTA: Descárgate la ruta para gps.
RUTA FOTOGRÁFICA: Mírame
PUNTOS DE INTERÉS: Como punto de interés tenemos el rastro de Jalón que se monta los sábados y acude un gran número de visitantes.
DESNIVEL POSITIVO: Partimos de 360 metros en la carretera poco antes de llegar a Pinos.. La cima está a 724 m. contamos con un desnivel acumulado de 743 m.
Para llegar a Pinos tomaremos la carretera que une Altea con Benisa, unos metros antes de llegar a Benisa veremos el cruce de Jalón. Entramos y a los pocos metros ya tenemos el desvío a Pinos por la cv 749. Nada más llegar al cruce que baja a Pinos, veremos una hornacina con una Virgen, es importante ya que no tenemos que bajar, nos quedamos en la misma cv 749. Junto a a la Virgen podemos dejar el coche y comenzamos la ruta entre dos casas que hay 20 metros más arriba.
CRÓNICA:
Dejamos el coche junto a esta pequeña hornacina donde se guarda una Virgen y desde aquí comenzamos a caminar, justo en frente de esta escultura hay un par de casas y en medio sale una pista asfaltada que a los pocos metros se convierte en una senda.
Esta de forma ascendente y sin ninguna confusión nos lleva hasta la casa, ya en ruina, de la Vicenta. Encontraremos una subida progresiva y sin dificultad. La senda está muy bien marcada, no hay dudas.
Una vez en la casa tomamos una pequeña senda que sale a la espalda de la casa y que nos lleva hasta un cruz de hierro, esta es la que supuesta mente pensamos es la ermita de Marnés. Aunque verdaderamente no hemos visto ningún resto ni vestigio de construcción. Igual estamos equivocados aunque en el mapa aparece este punto como la ermita.
Seguimos por la pista hasta un corral de reciente edificación, desde aquí sale una pequeña senda, también marcada que nos lleva hasta la cima de la loma. Un precioso paseo con unas bonitas vistas a ambos lados de la comarca.
Como siempre una paradita en la cima, abrazos y fotos. Desde aquí se ve evidente la senda que discurre por arriba de la loma. Continuamos nuestro caminoEn dirección a la siguiente cima.
Una vez en el collao, y para que no se hiciera muy tarde tomamos la decisión de bajar en recto hacia una pista ancha asfaltada que hay justo a nuestros pies, este tramo será de unos 200 metros pero sin senda, es una zona con piedra suelta y zarzas que debemos ir sorteando para ver el paso más adecuado.
Este tramo requiero de atención y algo de pericia.
Una vez en la pista ancha, nos queda desandar los pasos caminados por el cordal, pero ahora casi en la base de la sierra. Este camino nos lleva hasta un mirador que guarda una balsa de agua. Desde aquí una pequeña subida de 400 metros que nos deja nueva mente en la casa de la Vicenta.
Después de unas semanas de parón por parte de la mayoría de miembros del grupo hemos quedado para hacer una marcha de rehabilitación, para ello hemos elegido este bonito y fácil paseo que nos lleva por esta sierra que sirve de divisoria entre mar y montaña de la Marina Baixa.
Dejamos el coche junto a esta pequeña hornacina donde se guarda una Virgen y desde aquí comenzamos a caminar, justo en frente de esta escultura hay un par de casas y en medio sale una pista asfaltada que a los pocos metros se convierte en una senda.
Esta de forma ascendente y sin ninguna confusión nos lleva hasta la casa, ya en ruina, de la Vicenta. Encontraremos una subida progresiva y sin dificultad. La senda está muy bien marcada, no hay dudas.
Desde aquí la mejor opción es desandar nuestros pasos y volver hasta la casa de la Vicenta y retomar la pista. Nosotros hemos intentado seguir por arriba del tossal pero hay muchas zarzas y el camino no está muy bien para caminar, solo apta para la familia de jabalís que nos aparecieron de repente.
Seguimos por la pista hasta un corral de reciente edificación, desde aquí sale una pequeña senda, también marcada que nos lleva hasta la cima de la loma. Un precioso paseo con unas bonitas vistas a ambos lados de la comarca.
Como siempre una paradita en la cima, abrazos y fotos. Desde aquí se ve evidente la senda que discurre por arriba de la loma. Continuamos nuestro caminoEn dirección a la siguiente cima.
Este tramo requiero de atención y algo de pericia.
Una vez en la pista ancha, nos queda desandar los pasos caminados por el cordal, pero ahora casi en la base de la sierra. Este camino nos lleva hasta un mirador que guarda una balsa de agua. Desde aquí una pequeña subida de 400 metros que nos deja nueva mente en la casa de la Vicenta.
Desde este punto regresamos al coche siguiendo la senda de subida. Una bonita ruta ideal en una soleada mañana de invierno.
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